La humilde madre de familia venía soportando el hambre y el frío en una carpa de plástico en compañía de sus menores hijos.
Al ver esta dolorosa escena, los vecinos se unieron y poco a poco más pobladores apoyaron la idea de darle una vivienda en reemplazo de la carpa.
Sin embargo, para lograr el objetivo aún se requieren más adobes y otros materiales para darle resistencia a la futura casa.

